Más Páginas en mi blog

Bienvenid@, el Señor continúe bendiciendo tu alma

El tiempo está cerca de cumplirse, y mi Señor necesita reclutar soldados que estén dispuestos a renunciar a este mundo para llevar a cabo la buena batalla, si crees que eres lo suficientemente fuerte para enlistarte en el ejército celestial, enlistate hoy mismo, entrega tu vida a Cristo y saldrás vencedor.

martes, diciembre 25, 2012

El día del Señor vendrá

Apocalipsis 1:7 - He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que le traspasaron, y todos los linajes de la tierra harán lamentación a causa de Él. Así sea. Amén.
Sabed ante todo, que en los últimos días vendrán burladores, andando según sus propias pasiones, y diciendo: "¿Dónde está la promesa de que Jesús vendrá nuevamente? Pues muchos han muerto, y todo continúa tal como estaba desde el principio de la creación." (2da Pedro 3:3-4).
No vivan confiados, que cuando menos lo esperen Cristo Jesús vendrá por nosotros, su pueblo y entonces se oirá gran lamento. Advertidos estamos y en guerra avisada mueren menos soldados.
Muchos se han burlado desde siempre diciendo: "Es paja todo eso de Dios y Jesús, Jesús solo fue un hombre más como Mahoma, Buda o el Dalai Lama", pero cuando TODO ojo le vea venir entre las nubes, su garganta no les dará a vasto para tragarse sus palabrerías.
Jehová es Dios de misericordia y su hijo murió para que TODO aquel que confiese que Jesús es el Señor, tenga vida y vida en abundancia.
Hay quienes dicen: "Todos somos hijos de Dios", mentira del demonio es esa, yo puedo crear una silla y es creación mía, puedo hacer un hijo y es creación mía, pero si alguién despedaza mi silla; me molestaré porque yo la hice, más no hubiera corrido en su auxilio porque siendo creación mía, no me llamó diciendo: "Padre,ayúdame", más si alguien quiere dañar a mi hijo y este clama a mí diciendo: "Padre, ayúdame", correré a salvarle porque siendo creación mía,me ha llamado padre, por tanto hijo mío es.
Jesús dijo que hijo en Mateo 7:21-22, "No todo el que Me dice: 'Señor, Señor,' entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de Mi Padre que está en los cielos. "Muchos Me dirán en aquel día: 'Señor, Señor, ¿no profetizamos en Tu nombre, y en Tu nombre echamos fuera demonios, y en Tu nombre hicimos muchos milagros?' Y entonces les protestaré: Nunca os conocí; apartaos de mí, obradores de maldad.
Porque aunque hicieron buenas obras, hablaron de Jesús y mucho más, pero nunca le siguieron, ni se arrepitieron, ni se apartaron del mal, pues tambien dijo Jesús: "Por su fruto les conoceréis" en Mateo 7:16, pues la salvación NO se gana con obras para que nadie se gloríe.
Porque por gracia ustedes han sido salvados por medio de la fe, y esto no procede de ustedes, sino que es regalo de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe. Efesios 2:8-9
Por medio de la fe en la obra redentora de Cristo Jesús, pero también hay que seguir haciendo buenas obras pues dice Santiago 2:17, "Así también la fe por sí misma, si no tiene obras, está muerta."

Estamos a tiempo, pues hasta que Cristo venga y mientras haya vida, hay esperanza.
Por tanto, acerquémonos con confianza al trono de la gracia para que recibamos misericordia, y hallemos gracia para la ayuda oportuna. Hebreos 4:16.

domingo, octubre 07, 2012

No creas las mentiras del demonio


 
Hay quienes estan apartados de Dios y piensan:
"Estoy mal, no volveré y no le pediré porque estoy apartado", más yo les digo que cuando uno está "enfermo" es cuando con mayor razón deberían visitar al "médico (por excelencia)"

Que seamos infieles no quiere decir que Dios lo sea, pues Él es fiel a pesar de nosotros, su palabra dice: TODAS las cosas van bien a los que aman al Señor, nótese que dice a los que AMAN al Señor, no dice a los que le son fieles y no le fallan.

No te equivoques ni le creas al demonio cuando pone en tu pensamiento que no tenemos perdón de Dios; que no le podemos pedir ayuda porque somos pecadores, pues Jesucristo vino al mundo a morir no por los justos, sino por los pecadores.

No nos equivoquemos, Él es el padre mencionado en la historia del hijo pródigo, siempre está pendiente de quienes nos arrepentimos de corazón y está listo para recibirnos y ayudarnos a cambiar, solo debemos disponer nuestro corazón y creer que a pesar de nuestros tropiezos, Él hará su obra en nosotros.

He estado apartado del Señor, cometiendo pecado y haciendo lo que no es bueno, pero ahora he decidido volver a pedirle perdón y con arrepentimiento le he pedido que me ayude de nuevo y espero que me ayude a mantenerme firme hasta el día glorioso de su regreso. Gloria a Dios por recibirme de nuevo.

lunes, septiembre 17, 2012

El Maestro ayuda al alumno aplicado

Un cristiano no siempre es aquelque parece ser perfecto, sino aquel que a pesar de sus errores, debilidades y caídas, sigue confiando en que Jesucristo le sacará adelante y entiende que: NO ES POR OBRAS para que ninguno se gloríe de sí mismo, sino que es por la gracia de Jehová Dios.

Esto no significa que podemos pecar deliberadamente, pues la palabra dice: "Mira que te mando que te esfuerces y que seas valiente".


Al igual que un maestro cuando mira que un estudiante por más aplicado y atento sea en clase y estudioso, reprueba, el maestro hace lo que puede para ayudar ese estudiante a seguir y lograr su objetivo, el de triunfar, de igual modo Jesucristo nos ayuda y conoce nuestro corazón y ve cuanto nos esforzamos por cambiar a pesar de nuestras fallas, pero si un maestro ve que un alumno es un vago e irresponsable, difícilmente le dará su apoyo, Jesús nuestro maestro nos ayudará a levantarnos cada vez que caigamos siempre y cuando nosotros estemos dispuestos a cooperar.


¿Caíste?, levántate, ¿Pecaste? arrepiéntete, pide perdón al Señor y continúa adelante, porque mientras haya vida, hay esperanza, más nunca, te des por vencido o por vencida, Él está dispuesto a sostenernos a pesar de nuestras faltas.



jueves, mayo 31, 2012

No permitas que el fuego se apague


 

(Copiado textualmente del blog: Mensajes alentadores)

Texto: San Mateo 6:6 En los tiempos bíblicos donde se establecía una batalla, una lucha, la recompensa se llamaba botín. El ganador tenía derecho de recoger el botín, el cual podía consistir en oro, riquezas, tierras o esclavos. Para poder tener una recompensa hay que pasar primero por una batalla, un desafío y ganar, entonces la comunión tiene recompensa.

La Biblia nos cuenta que Jesús al irse de esta tierra, dijo que iba a enviar a uno como Él, el llamado paracletos (al Espíritu Santo). Jesús subió a los cielos sabiendo que volvería a buscar a su pueblo, pero mientras tanto dejó al paracletos, para que cada vez que clames a Él, cada vez que lo busque de una manera especial, se haga real en tu habitación.

Es importante que entendamos que el Espíritu Santo no es una persona física, sino espiritual, y al encontrarnos con él estamos teniendo comunión con una persona que siente, una persona que piensa, una persona que tiene voluntad, una persona que quiere hacernos bien y que nunca nos va a fallar. Él es nuestro mejor amigo.
En San Mateo 6:6 dice: “Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público”.
Esto quiere decir que hay recompensa a la comunión.

¿Cómo viene la recompensa? Viene cuando me encierro y me dispongo a orar.
En el libro de Malaquías 1:10a. (Leer) el profeta está diciendo: “Yo prendí el fuego en el altar, pero las puertas del templo están abiertas y el frío gélido del mundo, el viento del mundo está comenzando a soplar y el altar que yo encendí se está apagando.
Esto nos lleva a reflexionar sobre los vientos, Jesús se tuvo que enfrentar a una tormenta y reprendió los vientos. El Señor nos dice: “Cierra la puerta porque hay correntada y se está apagando el fuego”. Los vientos tipifican a las modas, las tendencias y las tentaciones que vienen a apagar lo que Dios encendió. Él está llamando a sus sacerdotes, a su iglesia, a cada uno de nosotros para decirnos: “En estos días el viento está soplando más que nunca sobre este mundo, la frialdad, la apostasía y la rebeldía se han instalado. Una forma tibia e irreverente delante de Dios se ha instalado y sabemos según la Biblia que todo esto irá de mal en peor. Pero mientras esto suceda en el mundo, en la iglesia se deben cerrar las puertas y se debe cuidar el fuego. Esto es para nuestro corazón y también para la iglesia; no debemos permitir que las corrientes de este mundo ingresen a la iglesia diciendo: “Bueno, si en el mundo se hace, ¿porque no acá?”. Entonces sucede como dice la Biblia, que comenzamos a llamar bueno a lo malo y malo a lo bueno. No permitamos que los vientos apaguen el fuego. No hay nada más frustrante que haber recibido algo de Dios, una fuerte pasión por su presencia y haberlo perdido, dejando que el viento frío del mundo entre a nuestro corazón.

Cierra la puerta

En el libro de Nehemías capitulo uno, nos habla del pueblo que salió cautivo de Jerusalén. Nehemías 1:3(Leer).
Las puertas en la Biblia nos indican acerca de la autoridad y de la influencia. Los sabios, los profetas, las personas de autoridad, aquellas personas que tenían algo para hacer o para decir se sentaban a las puertas. Las puertas cerradas establecían un marco de protección para las naciones. Cuando vinieron los enemigos de Israel a atacarlos, lo primero que hicieron fue derribar los muros y quemar las puertas y cuando esto aconteció, entraron y tomaron cautivos al pueblo de Dios. Pero hay una gran noticia: “Jesús reconstruye puertas”, esta palabra es para que nuestra vida espiritual sea reconstruida y para comenzar a vivir en victoria.
En San Mateo 6:6 nos dice que debemos cerrar la puerta cuando oremos.
Este es el tiempo donde nosotros tenemos que definirnos y pararnos firmes diciendo: “Este es el año donde voy a tomar la victoria, donde voy a vivir una nueva realidad espiritual, donde voy a tomar lo que he estado esperando por años”.

¿Cuál es el secreto, o la clave para que esto ocurra?

Cuando el Señor habla de cerrar la puerta está haciendo referencia a la privacidad, lo cual significa que no hay nada más importante que Él y que debe ser el centro de atención. El Señor está queriendo decir que al cerrar la puerta debemos establecer un marco donde lo que voy a hablar con él, no debe compartirse con los pensamientos y la preocupaciones ya que lo único que provocan es distracción que me impide llegar a una buena comunión con el Señor. Debemos aprender que al cerrar la puerta, estamos entrando en un tiempo exclusivo con Dios, dejando de lado todo tipo de distracción.

También la Biblia dice que debemos orar en nuestro cuarto. No dice que lo hagamos en la cocina, o mirando televisión, mientras caminamos, en el subte, donde podemos distraernos, sino que nos dice que cuando oremos en nuestro cuarto, Él se manifestará y nos recompensará en público. Dios quiere un lugar exclusivo para estar con Él.
Cuando el Señor hace referencia al cuarto, en realidad está hablando de intimidad, donde somos nosotros mismos, donde nos sinceramos, donde somos transparentes y auténticos, donde no mostramos una imagen, una apariencia, donde no tenemos un prestigio o un nombre que cuidar, donde somos simplemente una persona necesitada, hambrienta y desesperada por Dios.

Es en ese cuarto donde vas a tener acceso exclusivo hacia Dios. Él y tu persona se unirán en un encuentro espiritual que cambiará y renovará tu vida para siempre.

El Lugar secreto

Cuando el Señor dice en su palabra: “Ora a tu Padre que está en lo secreto”
Aquí podemos encontrar otra clave importante. Cuando el Señor dice en su palabra “Buscad y me hallareis, llamad y se os abrirá”

Cuando habla del secreto, pereciera que el Padre nos deja ver en su palabra que Él tiene como un lugar exclusivo, un escondite que para el mundo está cerrado pero para sus hijos está abierto. Quiero animarte a frecuentar ese escondite, como lo hizo Moisés cuando le dijo: “Señor si tu gloria, si tu presencia que yo frecuento cada día no ha de ir conmigo, entonces no me saques de aquí”

David dijo: “El que habita al abrigo del altísimo, morará bajo la sombra del omnipotente”, ese es el lugar secreto, el abrigo del altísimo. El que habita en el lugar secreto morará bajo la sombra del omnipotente, David continuó diciendo: “Diré yo a Jehová; castillo mío, fortaleza mía, mi Dios en quien confiaré. Él te librará del lazo del cazador y de la peste destructora, con sus plumas te cubrirá y debajo de sus alas estarás seguro”. Dios quiere que descubramos nosotros también ese lugar secreto en el cual David habitaba.

En 2 de Reyes 4:1-5 (Leer)
¿Que ocurrió cuando ella se tuvo que encerrar?
Ella al encontrarse con Eliseo le dijo que no tenía nada, que iba a perder a sus hijos, quienes serían llevados como esclavos. Y el hombre de Dios le respondió en otras palabras: “La solución está detrás de la puerta, cuando te encierres, Dios cancelará todas tus deudas, él se comenzará a glorificar en tu vida y el aceite del Espíritu Santo no va a cesar de fluir”.

¿Qué tuvo que hacer esta mujer para recibir el milagro de parte de Dios?

Tuvo que encerrarse y creer; eso es lo que nosotros debemos hacer para ver la gloria de Dios fluir en nuestra vida, porque hay recompensa a la comunión.

Las vasijas fueron llenas del aceite. Si en tu vida hay un vacío, Dios lo llenará con su aceite fresco!!
Podemos encontrar otro ejemplo en la historia de la mujer sunamita. Esta historia hace referencia a una mujer que invitaba insistentemente a Eliseo para que comiera en su casa y cuando él pasaba por aquella ciudad, venía a comer a su casa, hasta que esta mujer terminó preparándole un cuarto en su casa para él. Luego Eliseo le declaró que ella tendría un hijo, este nació, se crió y siendo ya más grande se descompuso y murió. Ella fue y lo acostó en el cuarto donde años atrás había dormido el profeta, en la misma cama. Y luego fue a buscar a Eliseo, lo convenció al profeta para que volviera a aquel cuarto.

Dice la escritura en 2 de Reyes 4:32-36 (Leer) que Eliseo cerró la puerta y oró. ¿Qué pasó luego?
Dios lo resucitó. Volvieron a la vida los proyectos que representaba ese niño, cuando él cerró la puerta y oró, el calor del Espíritu Santo vino sobre ese niño y revivió.

La recompensa viene detrás de la comunión, cuando nos encerramos con Dios y oramos algo pasa. Dios resucitará tus sueños y proyectos cuando te encierres a buscarlo detrás de la puerta y a solas!! (mensaje de Claudio Freidzon) Compartido en www.MensajesAlentadores.com | Reenvíalo a tus contactos

miércoles, mayo 23, 2012

Confia en Dios en medio de la adversidad y los problemas



...¿Alguien tiene algo en mi contra?
¡Vayamos juntos ante el juez!
¿Alguien se cree con derecho de acusarme?
¡Que venga y me lo diga!
El Señor es quien me ayuda; ¿Quién podrá condenarme?...
(Isaías 50:8-9 - Biblia: Dios Habla Hoy)

Seguramente sobraría quien tenga algo en mi contra y de fijo quienes me miran como un hipócrita se creen con derecho a señalarme y a acusarme, pero como lo expone el profeta Isaías, quien tenga algo en mi contra o se crea con derecho de acusarme que se junte conmigo delante del juez (o de Dios) para que juzgue la causa, el profeta está muy seguro de que Dios lo respaldará sea cual sea la acusación que se le haga y de hecho cualquiera de nosotros puede sentirse seguro de que Dios nos puede respaldar ante cualquier amenaza o acusación, pero vamos unos versos antes para saber porqué el profeta siente esa seguridad en Dios, pues no es simplemente porque sea profeta, sino que dicen así los versos anteriores a lo que hemos leído:

El Señor me ha instruido para que yo consuele a los cansados con palabras de aliento.
Todas las mañanas me hace estar atento para que escuche dócilmente.
El Señor me ha dado entendimiento y yo no me he resistido ni le he vuelto las espaldas.
Ofrecí mis espaldas para que me azotaran y dejé que me arrancaran la barba. No retiré mi cara de los que me insultaban y me escupían.
El Señor es quien me ayuda: por eso no me hieren los insultos; por eso me mantengo firme como una roca, pues sé que no quedaré en ridículo.
(Isaías 50:4-7 - Biblia: Dios Habla Hoy)

Como podemos leer en este texto, el profeta habla de su relación con Dios, en que es Él quien lo instruye para que dé aliento a los que están agobiados, además menciona que TODAS las mañanas le hace estar atento, o sea que TODAS las mañanas el profeta se presentaba delante de Dios (de seguro en oración) y que atendía el entendimiento que Dios le daba sin resistirse ni volverle las espaldas a Dios, o sea, era obediente a lo que Dios ponía en su mente y corazón.
También dice que permitió ser azotado y dejó que le arrancaran la barva, en pocas palabras fue sumiso; y no retiró su cara de quienes le insultaban y le escupían, entendemos que sin importar lo que le pasara afrontó la situación confiando en que sería Dios quien le ayudaría y que por eso los insultos le valían nada, manteniéndose firme sabiendo que Dios no permitiría que quedara en ridículo.

Ahora bien, guardando una relación con Dios, siendo sumiso haciendo caso omiso de las ofensas y confiando firmemente en Jehová Dios, el profeta se sentía seguro y sin temores, ante cualquiera que tuviera algo en contra o que quisiera acusarle, pues él sabía que delante de Dios estaba tranquilo pues se guardaba para Él.

¿Cuantas veces alguien nos ofende y de una vez nos ponemos a la defensiva?, el mismo Jesucristo nos enseñó que si nos dan por una mejilla debemos poner la otra, fue Él quien se mantuvo dócil ante una turba de pecadores que lo acusaban injustamente y así se mantuvo hasta su muerte en la cruz, pero Él sabía que delante del Padre, solo cumplía su voluntad, y es por eso que Jehová Dios lo levantó con gloria de entre los muertos y le dio potestad sobre TODAS las cosas.

Si queremos ser respaldados por el Señor, debemos aprender a vivir rectamente delante de Él, manteniéndonos en oración, apartándonos del pecado, creyendo en que Él hará lo necesario para sacarnos de TODA situación que se presente, debemos confiar siempre y a ciegas en el Señor, pues suyos son el poder y la gloria y Él tiene misericordia de quien Él así lo quiere, cada vez que oremos, clamemos por misericordia, pues por más bien que hagamos, siempre quedamos cortos ante su excelencia.

No pidamos a Dios que quite las tormentas, pidámosle que nos enseñe y nos ayude a mantenernos firmes aún en medio de ellas, ruego al Señor que no permita que nos apartemos de su mano divina y que guarde nuestras almas para gloria y honra de su maravilloso nombre, que nos cubra con la sangre del cordero que fue inmolado para perdón de nuestros pecados y salvación de nuestras almas. Amén y amén

domingo, mayo 06, 2012

A menudo me pregunto

 
(Preguntando a un cristiano)

¿Que si he pecado?
- Muuuchas veces y aún lo hago

¿Que si me da vergüenza?
- Sí, me apena decir que soy cristiano y mostrar lo contrario, pero confío en que aquel que comenzó la obra en mí la perfeccionará

¿Que si no pienso cambiar?
- Claro, pues se aflige mi alma y me arrepiento cada día, nada anhela más mi corazón que poder apartarme del pecado cada día un poco más.

¿Para qué voy a la iglesia si sigo pecando?
- Pues porque es cuando uno está enfermo cuando más debe asistir al hospital o permitir al médico que lo visite

¿Para qué diezmo si el pastor u otro se roban el dinero o lo despilfarran?
- Mi obediencia es para con Dios, si el pastor u otro roban o despilfarran lo que le pertenece a Dios serán ellos quienes den cuentas a Él

¿Que si creo que siendo bueno iré al cielo?
- No iré al cielo por ser bueno, ya eso es un fruto de mi arrepentimiento; pues el cielo no se gana por obras para que nadie se gloríe de sí mismo, si voy al cielo es porque Jesucristo pagó por mi condena para que me sean perdonados los pecados y mi alma sea salva, si despreciara esto, entonces sí podría estar seguro de que no iría al cielo

¿Que si creo que de verdad Dios existe?
- Si no lo creyera hace tiempo el que habría dejado de existir..., ¡sería yo!

domingo, abril 22, 2012

No soy yo mejor que tú y aún así Cristo me ama

Muchas veces me han enaltecido diciéndome: "Yo lo admiro a usted porque es un buen hijo" o "Ojalá yo tuviera un marido como usted" o "Es que si todos los hombre fueran como usted", en cierta forma me hace sentir muy bien porque me recuerdan lo que yo solía ser y lo que soy ahora que vivo con Cristo en mi corazón, aún cuando he cambiado mucho, me atrevo a confesar que no soy mejor de lo que eres tú, aunque sí; ese es mi anhelo, No el de ser mejor que tú que estás leyendo estas líneas, sino el de llegar a un nivel de santidad mucho más alto que el que tengo ahora, pues ahora no voy a salones de baile, no me voy de "parranda", la mayor parte del tiempo llego temprano a mi casa y no digo malas palabras.
Pero aún con todo y eso que suele hacer uno cuando le pertenece al mundo, aún me falta mucho por mejorar, aún suelo sentir cierta debilidad por la pornografía, por mirar mujeres con deseo y otros pensamientos que no van acorde a un cristiano realmente santo, y muchos me han dicho y yo también lo he llegado a pensar, pero bueno no hay hombres perfectos, pero eso no me es motivo para seguir en esas cosas, ¡Esa es la buena batalla!, la que procuro ganar todos los días en tanto me sea posible, por otro lado me recuerdo que Todo lo puedo en Cristo que me fortalece, por eso me hago llamar "Soldado de Cristo", porque mi guerra no es contra carne y sangre, sino contra pensamientos, debilidades, quejas, orgullos, mentira y otros tantos males que nos aquejan, pero camino cada día con mi fe y mi mirada puestas en Cristo Jesús, para poder tener la certeza de que un día voy a llegar a la estatura que Dios tiene para mí, porque quien que se afane puede añadir un codo a su estatura dice la biblia, a veces caaigo en mis debilidades, pero no me creo la mentira del demonio, esa que todos los que se han acercado a Dios se han creído muchas veces, la que dice: "Hipócrita!, no eres digno de ser llamado hijo del Dios altísimo, vas a la iglesia y aún así sigues pecando".
 De verdad te digo que si me la creyera, hace tiempo me habría vuelto al mundo, pero cuando he caído Cristo me ha tomado entre sus brazos y me ha levantado y nuevamente me hace saber que no hay pecado que sobrepase su infinita misericordia y amor, y me hace entender que eso no es motivo para pecar con libertinaje, sino que en lugar de sentirme derrotado, puedo acercarme a Él y curar mis heridas, pues el justo aunque caiga siete veces, siete veces lo levantará Dios y yo soy justo por la sangre derramada en la cruz del calvario, no porque sea muy bueno, sino por misericordia de Dios. ¡Gloria a Jehová Dios en los cielos! pues Él me ha amado con amor infinito y en Él espero con ansias el día de su regreso, por eso te digo, no soy yo mejor que tú y aún así Cristo me ama, con mayor razón te amará a ti, así que siéntete digno de recibirle en tu corazón y no permitas que el demonio te engañe con sus mentiras. Que mi Señor y Dios continúe bendiciendo tu alma y te mire eternamente con amor, si estás leyendo esto, reflexiona, apártate de todo lo malo, vuelvete a Él y recibe su perdón y perdonate a ti por los errores cometidos, sigue adelante y no desmayes, necesitamos más soldados para Cristo y su ejército santo.

imagen tomada de: "Killuminati 2012's blog"

¿Te jugarías el chance?


 
Puedes creer que es verdad o puedes no creerlo, pero, ¿Te jugarías el chance de que si es verdad, perder tu alma?

En el capítulo 21 de Lucas, en los versículos 25 y hasta el 35, se habla de la venida de Jesucristo:
"Entonces habrá señales en el sol, la luna y las estrellas, y en la tierra angustia de las gentes, confundidas a causa del bramido del mar y de las olas. Los hombres quedarán sin aliento por el temor y la expectación de las cosas que sobrevendrán en la tierra, porque las potencias de los cielos serán conmovidas. Entonces verán al Hijo del hombre (Jesucristo) que vendrá en una nube con poder y gloria..."

Y termina en el versículo 36 diciendo:
"Velad, pues, orando en todo tiempo que seáis tenidos por dignos de escapar de todas estas cosas que vendrán, y estar en pie delante del Hijo del hombre"

Casi podemos dar por sentado que lo que está ocurriendo en nuestros días es de lo que habla la biblia en este pasaje, seríamos unos hipócritas si pudieramos mirar al cielo, ver las nubes y sentir la brisa y decir: "Hoy va a llover", ¿Porqué hipócritas?, pues porque vemos las señales y las interpretamos, pero vemos las señales de los tiempos y no interpretamos que la gloriosa venida de Jesucristo está cerca.

Ahora veámoslo así:

Creo que Dios existe, que Jesucristo volverá con poder y gloria a juzgar a vivos y muertos y que me aparto del pecado para lograr misericordia, vivo mi vida haciendo lo que es bueno delante de Dios, no bebo licor en exceso, no fumo, no salgo a bailar, no ando fornicando, en fin, me vuelvo (a criterio de los hombres) "un santo", y resulta que al final de mi existencia, (según creencias ateistas) no había Dios, no había infierno y quedo en una especie de limbo o reencarno, pero de todo eso me doy cuenta hasta que muero, pues listo, no pasa nada, me "porté bien" en vano, pues nadie me iba a castigar, pero, ahora la otra cara de la moneda.

Supongamos que doy rienda suelta a mi carne, abuso de las bebidas alcohólicas, fumo, me descaro y cometo fornicación sin ningún remordimiento, robo, engaño, en fin, me vuelvo un pecador descarado y descarriado sin temor de Dios, al fin de mi vida, me doy cuenta de que Dios sí existe, que al morir sin aceptar a Jesucristo como Señor y Salvador de mi vida, y sin arrepentirme lo único que me espera es una eternidad de dolor y sufrimiento, y me doy cuenta de que YA NO PUEDO HACER NADA pues JESUCRISTO LO HIZO TODO al morir en la cruz y esa era la cancelación de mi condena y que yo la desprecié, ahora pregunto de nuevo, ¿Te jugarías el chance?

Es por eso que debemos orar en todo momento, porque no sabemos en que momento haya de venir Jesucristo por nosotros y no sabemos si habremos de morir antes de que Él venga, y si morimos sin Él, peligra nuestra alma de ser arrojada al lago de fuego.

Oremos a Dios, leamos la biblia pidiendo al Señor que dé revelación a nuestro entendimiendo, y que nos ayude a vivir rectamente delante de Él y que si fallamos en el camino que, nos perdone y nos ayude a levantarnos de nuevo, que nos dé nuevas fuerzas cada día para mantenernos en pie de lucha y alcanzar la victoria que es nuestra corona de vida en Cristo Jesús.

Si quieres puedes hacer esta oración:
Señor Jehová, Dios y Padre de mi vida, he pecado contra ti y al hacerlo he pecado contra mí mismo(a), estoy arrepentido(a) y quiero hacer lo que es bueno delante de ti, te suplico misericordia, te pido que me des la fuerza, el entendimiento, la dirección y tu Santo Espíritu para poder caminar en pos de ti, que pueda apartarme del pecado y que logre una mejor relación contigo, reconozco que soy pecador(a) y que necesito de tu presencia para lograr mis metas, guarda mi alma para la gloria y la honra de tu Santo nombre, reconozco que Jesucristo es el único camino hacia ti y que ni la virgen, ni ningún santo, ni religión, ni estilo de vida me podrán llevar a la salvación, que soy salvo únicamente por tu misericordia, pero en agradecimiento quiero vivir para ti, guarda mi vida y escribe mi nombre en el libro de la vida, no me permitas apartarme de ti nuevamente, en el nombre de Cristo Jesús, amén y amén.

Busca un lugar donde congregarte para compartir y escuchar testimonios de como Dios ha cambiado vidas, de ser posible sirve a los demás, no dejes de leer la biblia, si no tienes una visita el sitio www.bibliaparalela.com ahí la encontrarás en varios idiomas o si no tiene recursos para comprar una en papel escriba una carta solicitando una a:

LeSEA Broadcasting – 61300 Ironwood Rd. - South Bend, IN 46614 

y se supone que en el transcurso de cuatro a seis semanas ellos le enviarán una (aunque leí de un muchacho que se la entregaron 10 meses despues, despues de todo son miles de biblias las que se reparten).


viernes, abril 06, 2012

¿A qué porcentaje perteneces?


 
El 85% de TODOS los que decimos ser cristianos y que vamos a la iglesia cada domingo (o de vez en cuando) y creemos ser salvos, aún amamos al mundo y los placeres que ofrece. ¿Qué, dices que miento?, responde sí a una de estas preguntas y luego me dirás si miento:
  1. ¿Te sientas a mirar la televisión o usas el internet por horas y no precisamente para tu edificación?
  2. ¿Te ríes de las bromas que hacen tus amigos aún cuando lo que dicen son groserías?
  3. ¿De vez en vez cuentas un chiste con "doble sentido"?
  4. ¿Lees la biblia menos de una hora diaria?
  5. ¿Si vas a la iglesia, no ha terminado el culto y ya estás pensando en lo que harás para distraerte cuando llegues a casa?
  6. ¿Alguien te ha hecho algún mal y tú le guardas resentimiento?
  7. ¿No oras cuando te levantas, cuando comes o por lo menos cuando te acuestas?
  8. ¿Actúas más de acuerdo a tus sentimientos que a lo que te dice tu espíritu?
  9. ¿No hablas con Dios en ningún momento del día?
  10. ¿Pecas y no sientes siquiera un poco de remordimiento?
  11. ¿Inventas excusas para faltar a la iglesia?

¿Aún piensas que te miento?, solamente un 15% de los convertidos buscan realmente del reino de Dios y su justicia, solo ese 15% se ha arrepentido y apartado del pecado.

Perdóname Señor, porque he sido débil, porque de todas estas preguntas he respondido sí a todas y cada una, ayúdame a cambiar, a ser instrumento en tus manos para la obra salvadora de Cristo Jesús, que sea mi vida conforme a lo que tienes dispuesto para mí y si tienes que quebrantar mi corazón házlo, pues Tú como Padre al que amas a ese corriges y el hijo sabio acepta la reprensión de su padre.

Estoy cansado del pecado, estoy cansado de ser un cristiano mediocre, que es como una caña que el viento la mueve para donde quiere, quiero hoy Señor Jesús vivir en mis convicciones, ¡Oh, cuán grande es Dios y cuán grande su misericordia! que sabe que ninguno que lee esto es tan pecador como yo y aún así me mira con amor y está dispuesto a levantarme, pues dice su palabra que si el justo siete veces cae, siete veces será levantado y aunque soy pecador soy justificado por la sangre del sacrificio de Jesucristo.
¡Gloria, Poder y Honra sean al nombre de Jehová ahora y por la eternidad!


Date cuenta, mira el vídeo! 
 



lunes, febrero 27, 2012

¡Aún así no os volvisteis a mí!

 
Escucho por todas partes personas que me dicen: "Ya yo estuve en la religión cristiana, pero no me gustó" o "Ya fui a la iglesia evangélica, pero igual sigo pecando y me siento hipócrita".

La verdad, ¡qué pena!, para empezar con esto los entiendo, pues aunque he conocido de Cristo Jesús, de su amor y he recibido de Él misericordia, aún sigo cometiendo pecados, por esa razón los entiendo, pero si algo bien es cierto, es que he aprendido a no darme por vencido, me da vergüenza reconocer que he pecado y me da aún más presentarme delante de Dios, orar y pedirle que me perdone una vez más sabiendo que lo he ofendido, pero a pesar de la vergüenza que pueda sentir y de lo mal que me sienta por mis pecados, y por más que le pido que quite de mí esa debilidad de la carne a la cual Pablo en la primera carta a los Corintios pudo haber llamado "aguijón en la carne", Él; ¡Jehová!, solo me responde: ¡Bástate mi gracia!

Y es que debemos luchar contra el deseo de la carne pues los deseos de la carne se oponen a los de nuestro espíritu y a los del Espíritu Santo de Dios, pero sabe Dios que en la misma carne mora el pecado, es por eso que nos transformará y nos dará cuerpos nuevos e incorruptibles, pero volviendo al tema, ya muchos han conocido de la bondad y la misericordia de Dios y aún así se apartan y se vuelven al mundo, a lo que dice en la biblia:

Pues hubiera sido mejor para ellos no haber conocido el camino de la justicia, que habiéndolo conocido, apartarse del santo mandamiento que les fue dado.

Y también hago exhortación basándome en Amós capítulo 4 del verso 6 al 11 en los que el Señor dice: "... más no os volvisteis a mí", en estos versos el Señor a través del profeta Amós les hace ver que a pesar de los sufrimientos que Él permitió que pasaran, ellos no le buscaron sino que más bien se apartaron, Jehová nos muestra que Él es un Dios de amor, pero también de justicia, ciertamente Él está dispuesto a perdonarnos, pero debemos demostrar nuestro arrepentimiento apartándonos del pecado y viviendo un vida recta delante de Él.

Ya basta de poner excusas, satanás ha puesto mentiras en el corazón de los hombres y como desde el principio, las hemos creído y por eso nos apartamos más y más de su presencia. Satanás nos dice: "Eres un hipócrita, sigues alabando a Dios y aún estás en pecado", por favor, ¿acaso no es cuando estamos más enfermos cuando más debemos presentarnos ante el doctor para que nos cure?
¡Torpes; en lugar de salvarnos de ahogarnos en las llamas del infierno, nadando hacia la "Roca Firme" que es Cristo Jesús, nos adentramos más y más en el mar de nuestros pecados yéndonos a lo más profundo buscando nuestra propia muerte!

¡Y aún más he de permitir!, dice Jehová, por causa de su rebelión, más aquellos que escuchen y se arrepientan y se aparten de sus malos caminos alcanzarán misericordia.

No seamos tercos o duros de corazón, aún en medio del dolor, de la prueba, del sufrimiento, volvamos nuestros ojos a Jehová, clamemos a voz en cuello su santo nombre y Él que es lento para la ira y pronto para perdonar, nos librará de todo aquello que nos hace mal y aún si no recibiéramos en esta tierra la justicia, la recibiremos allá en la eternidad, pero por amor de Dios, volvámonos a Él, porque Dios no desprecia un corazón contrito (*que siente contrición) y humillado que se aparta del pecado.

*En el sacramento de la penitencia, dolor y pesar de haber pecado ofendiendo a Dios

sábado, enero 07, 2012

Les anuncio que me volveré al mundo porque mi pareja me fue infiel

Tomada de: www.amor.com.mx
¿Llamé tu atención?, pues que bueno, esa es la intención, te quiero hablar de esa clase de cristianos que a veces parece que están buscando una excusa para volverse al mundo, pero en este caso quiero hablar de los que parece que toman como excusa que su pareja les haya sido infieles para volver al hueco de donde el Señor los sacó.

La biblia dice: "Mira que te mando que te relajes y no gastes tus fuerzas", hermano, ¿De verás la biblia dice eso?; pues NOOOO!, Dios en la biblia dice: "Mira que te mando que te esfuerces y que seas valiente", por eso hay que leer biblia, guardar la palabra en nuestros corazones porque cuando venga el momento de prueba el Espíritu Santo tomará la palabra y la traerá a memoria.

Dios nos manda que seamos valientes, pero en cuanto nuestros padres, pareja, hijos o amigos nos fallan, nos encaprichamos y decimos: "Ya me cansé de ser buena persona" y empezamos a buscar del mundo, nos vamos a embriagar, a bailar, a fornicar y en el peor de los casos nos apartamos de Dios, empezamos a tratar de justificarnos con los demás, prestamos oído al mundo, empezamos a escuchar música secular, en fin todo lo hacemos justificados en el fallo de otra persona.

No seamos cobardes porque el reino de los cielos sufre violencia y solo los violentos lo arrebatan, SÍ, mi pareja me fue infiel, SÍ mis padres me rechazaron, SÍ mis hijos me desobedecen, SÍ mi mejor amigo me falló, pero NO, no debo apartarme ni a izquierda ni a derecha; solo porque otra persona me falló y decidió pecar e irse al mundo no significa que yo deba perderme también, lamento profundamente que mi pareja se pierda, que mis padres se pierdan, que mis hijos se pierdan, que mis amigos se pierdan, me duele que se pierdan y me abandonen, pero aunque el mundo me abandone mi Dios no lo hará, siempre y cuando yo me mantenga fiel a Dios.

Mi vida no depende de nadie, si porque alguien me falla yo me caigo en pedazos, es porque estoy poniendo a esa(s) persona(s) antes que a Dios, levántate, sacúdete el polvo, agarra fuertemente la mano de Dios y continúa tu camino hacia la vida eterna, porque si tu recompensa no estuviera en esta tierra, créeme que será grande allá en el reino, mira que te mando que te esfuerces y que seas valiente.

domingo, enero 01, 2012

¡Miserable hombre de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo de muerte?

Y antes yo vivía sin ley, pero cuando vino el mandamiento, el pecado revivió y yo morí. Y el mandamiento que era para vida, yo encontré que era para muerte. Porque el pecado, tomando ocasión por el mandamiento, me engañó, y por él me mató. De manera que la ley a la verdad es santa, y el mandamiento es santo, y justo, y bueno.
¿Entonces lo que es bueno, vino a ser muerte para mí? ¡En ninguna manera! Pero el pecado, para mostrarse pecado, obró muerte en mí por lo que es bueno, a fin de que por el mandamiento, el pecado llegase a ser sobremanera pecaminoso.
Porque sabemos que la ley es espiritual; pero yo soy carnal, vendido bajo pecado. Pues lo que hago, no lo entiendo, pues no hago lo que quiero; sino lo que aborrezco, eso hago. Y si lo que no quiero, eso hago, apruebo que la ley es buena.
De manera que ya no soy yo quien lo hace, sino el pecado que mora en mí. Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero, éste hago. Y si hago lo que no quiero, ya no soy yo quien lo hace, sino el pecado que mora en mí.
Hallo, pues, esta ley, que cuando quiero hacer el bien, el mal está en mí. Porque según el hombre interior me deleito en la ley de Dios; mas veo otra ley en mis miembros, que se rebela contra la ley de mi mente, y me lleva cautivo a la ley del pecado que está en mis miembros. ¡Miserable hombre de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo de muerte? Gracias doy a Dios por Jesucristo nuestro Señor: Así que, yo mismo con la mente sirvo a la ley de Dios; mas con la carne a la ley del pecado.
(Romanos 7:9-25)
No es excusa, pero el mismo Pablo lo entendía, por eso a veces mi alma se aflige al pensar, ¿Porque si mi alma quiere agradar a Dios y hacer su voluntad, no lo hago?
Pues porque estoy preso en este cuerpo de pecado, pero hay un gran consuelo que también dice: ¡Todo lo puedo en Cristo que me fortalece!

Y cuando le he pedido a Dios, quita este aguijón de mí para poder servirte mejor, Él me ha dado esta respuesta: ¡Bástate mi gracia!
Gloria a Dios por su misericordia ya Cristo Jesús por su sacrificio para gloria y honra de su nombre, perdón de mis pecados y salvación de mi alma, amén.