Muchas veces nos hemos preguntado quienes le hemos aceptado en nuestro corazón: ¿Porqué Dios no responde mi oración? o ¿Porqué no me da lo que le pido?, pues bien la respuesta que tengo la podrán comprender mejor los padres que los que no lo son.
Supongamos que mi hijo llega y me pide un cuchillo filoso para cortar algo, ¿Qué hago, se lo doy o no?, pues no se lo voy a negar sin antes analizar la responsabilidad con que mi hijo podría utilizar algo que aunque él lo quiere para hacer algo que necesita hacer, como cortar una cuerda o partir un pedazo de pan o de pastel, pero; ¿y si lo que quiere es cortar un cable eléctrico que está enchufado?, o ¿Querrá cortar la soga del cuello de algún perrito?, primero como un padre responsable le preguntaría: ¿Y como para qué lo necesitas? o ¿Realmente lo necesitas?, luego analizaría si mi hijo es obediente, pues al ser obediente sé que va a utilizar el cuchillo según las indicaciones que yo le dé, también analizaría si mi hijo suele ser prudente con lo que hace, pues las consecuencias de utilizar un cuchillo imprudentemente pueden ser incluso fatales, y también analizar su carácter, pués si es algo explosivo o impulsivo y si por algo se pone furioso mientras manipula el artefacto, pues bien, si lo pensaríamos bastante para darle un automóvil a un jovencito imprudente, presumido, iracundo e irresponsable; ¿o me equivoco?, pues ¿cuánto más tomará Dios en cuenta nuestra madurez espiritual?.
Pues como dice Dios en su palabra, que si nosotros siendo malos, (cuidamos) y damos buenas dádivas a nuestros hijos, cuánto más Él, con su infinito amor.
Pues entonces si no tenemos esa madurez espiritual y si no somos buenos administradores, y si no tenemos a Dios en primer lugar en nuestros corazones y en nuestras vidas, ¿Cómo pretendemos que nos dé TODO lo que le pedimos?, recordemos que Jesús hacia la voluntad agradable del Padre y por eso, Dios le respaldó en TODO lo que Cristo Jesús pidió, excepto obviamente en cuanto a ser crucificado cuando Jesús le dijo: "Padre, si es posible aparta de mí este cáliz", pues Dios sabía que si Jesús no era crucificado nosotros no habríamos recibido el perdón por nuestros pecados y la historia sería otra.
Pero volviendo al punto; antes de preguntar ¿Porqué Dios no me da lo que le pido?, primero preguntémonos; ¿Estaré haciendo la perfecta voluntad del Padre?¿Seré espiritualmente responsable como para controlar y administrar lo que le estoy pidiendo a mi Padre?
Debemos aprender a pedirle a Dios lo que Él considera que es mejor para nosotros, pues yo en lugar de darle algo que a fin de cuentas resulte peligroso para la vida de mi hijo, prefiero negárselo o en dado caso intervenir directamente para que él no se exponga, pero todo es por el amor que le tengo, aunque me trate de "mal padre" porque no le di lo que me pidió.
Dice en Santiago 4:3:
"Pedís, y no recibís; porque pedís mal, para gastar en vuestros propios placeres."
Aprendamos a ser pacientes y a esperar la perfecta voluntad de nuestro Padre Eterno. Bendiciones!
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